• Bola de Papel, palabras en proceso

    Bola de Papel
    Palabras en proceso.

    Somos un proyecto autogestivo de producción y difusión de propuestas narrativas, poéticas, gráficas y de opinión, como contrapeso a los mecenazgos parasitarios y los feudos literarios. En una era donde la provocación huérfana, el protagonismo patológico y los discursos vacuos son la constante, la mesura, lo matérico y lo templado son nuestra apuesta, y bajo esta premisa Bola de Papel publica historias, ideas, sentimientos, y literatura sin ataduras, como una invitación al pensamiento, a la reflexión y la imaginación, sin mayor pretensión que la de escribir, leer y compartir.

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  • 500 minutos, memoria y canción
    Ehekatl Hernández

    ¿Podemos aprender de una canción? ¿enseñar a morir, a vivir, a en- tender nuestro mundo interior y nuestro lugar allá afuera?
    500 minutos es un libro que hay que leer y escuchar sin prejuicios, sin el rigor del crítico o del melómano fundamentalista, para de esta manera dejarse llevar simplemente por el ejercicio de la memoria, ese que evoca imágenes y sensaciones en torno a una canción. Dentro de estas páginas la música es camaleónica, se torna en momentos vertiginosa y en momentos contemplativa, su espectro es un cóctel de géneros, pero ante todo pero sobre todo es música que emociona y acompaña.
    Así a través de un centenar de canciones que se reinterpretan y transforman, Ehekatl Hernández construye crónicas y ensayos breves, creando una bitácora de experiencias personales, cuyas reflexiones-disertaciones, que van de lo anecdótico a lo filosófico, poco a poco develan una lectura más profunda sobre temas cotidianos como la juventud, el tiempo, la felicidad, el amor, la muerte o la vida misma con todos sus bemoles. Leer +

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  • Luz y Sombra
    Antología de cuento breve

    Primera antología de cuento breve de Editorial Bola de Papel. Una selección de autores inéditos de México, Colombia y España, que llevan sus relatos por terrenos de la ficción, el terror, el humor negro e incluso narrativas cercanas a la crónica; donde el miedo, la otredad, la demencia y la enfermedad del alma son la constante en un imaginario íntimo, que como en un trayecto por túneles y claros, nos llevan por el sinuoso camino de la condición humana, de la más radiante espiritualidad a los más oscuros instintos expuestos en diversas formas y ritmos narrativos dentro de una colección de catorce relatos, donde lo lumínico y lo sombrío se desplazan mutuamente para fundirse en un todo. Leer +

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  • Mejor Arder
    Mauricio Álvarez

    Mejor arder es un libro de verano que se escribe en invierno; en el que el amor entre hombres, entre libros y entre palabras se da en espacios acotados, entre paréntesis, a los que se pretende ordenar bajo un orden cardinal, que numera cada uno de esos textos entre paréntesis. Dentro de sus páginas se disiente ante el amor romántico, ante el amor hetero, ante el amor jerárquico y ahí es donde comienza el disentimiento frente a las formas convencionales del poema; pues aunque aparentemente se queda en la parte izquierda de la página sin desperdigarse demasiado y conserva un ritmo y una cadencia de confesión y encantamiento con las palabras: la apuesta por el juego está en el detalle. Leer +

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  • No siempre va a llover
    Karlos Equis

    Darío es hijo de la crisis, nació y creció en ella dos décadas antes de finalizar el milenio. Presagia un futuro incierto a partir de su desventura adolescente, colmado de conflictos no resueltos con sus padres, ostracismo, amor y rabia. Por ello sólo le importa su banda, sus romances ficticios, y escuchar sus mixtapes mientras rueda sobre el asfalto de una Ciudad de México que no deja de hundirse. En su walkman suena todo aquello que sabe a fuga: Mano Negra, Bauhaus, Nick Cave, Joy Division, Los Fabulosos Cadillacs o Santa Sabina; mientras va dando tumbos entre punks, darks, rockers y alguno que otro grupo de indefinidos como él y sus amigos, Darío intenta encontrar su lugar en un mundo que parece haberse olvidado de él, percatándose de alguna manera del desencanto de su generación. Esa que pasará sin reflectores, aplastada por el escepticismo crónico de esos días cuando la voz, el asombro y la pertenencia se ganaba en la calle, de puño en puño, de boca en boca y de derrota en derrota, en esa revolución cotidiana que resulta cuando se pierde la inocencia. Leer +

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